MOCIÓN QUE PRESENTA EL GRUPO MUNICIPAL CIUDADANOS FUENLABRADA RELATIVA A LA SUSTITUCIÓN DE SAL PARA EL DESHIELO POR OTROS COMPONENTES

 

EXPOSICIÓN DE MOTIVOS

 Cada invierno hemos hecho uso de sal en nuestras calles para eliminar esas placas de hielo que se producen ante la bajada de temperaturas, sobre todo en horario nocturno y evitar de esta forma resbalones de los viandantes, al igual que conseguir ofrecer un estado óptimo de la calzada para la conducción.

La sal es el agente de deshielo más usado y previene o derrite el hielo y la nieve de forma eficiente. Además es fácilmente accesible y siempre hay disponibilidad, de sencillo almacenaje y manipulación. Su función, tras disolverla en el agua, es provocar que baje la temperatura a la cual dicha agua se congelaría, aunque su efecto depende del nivel de concentración. Sin embargo, en los últimos años, es cada vez más sonoro, los efectos negativos que produce la sal, una vez disuelta, sobre el  medio ambiente. Ciudades como Berlín tienen prohibido desde 2009 el uso de sal para deshielo. Países como Suecia,  Alemania, Austria, Canadá o EE UU van cesando el uso de sal para el deshielo y en sus poblaciones hacen uso de gravilla, una de las múltiples alternativas.

Debemos conocer el impacto negativo que produce dicha sal en el medio ambiente, los daños ecológicos que provoca en el agua potable del subsuelo, así como a plantas, árboles y resto de la flora próxima. De la misma forma debe saberse el impacto que puede originar a las mascotas en sus paseos sobre las aceras de nuestro municipio, ya que el cloruro de sodio que se disuelve sobre el agua líquida enfría el hielo hasta temperaturas que llegan a alcanzar los 20 grados bajo cero y esto puede provocar quemaduras en las almohadillas de los citados animales de compañía. La sal, además, acelera la corrosión en el pavimento de las carreteras, actúa sobre la capacidad de absorción de nutrientes del suelo y también sobre la pérdida de permeabilidad de dicho suelo, así como en los vehículos, en los cuales actúa como oxidante en su chapa y otras construcciones civiles de hierro como puentes, túneles o pasos.

Se calcula que el empleo de sal contra las heladas es el responsable de la muerte del 90% de los árboles en algunas grandes ciudades europeas. Otros estudios indican que este agua salada que acaba en el alcantarillado de las ciudades no se diluye por completo en las plantas de depuración y acaba en los ríos, filtrándose en acuíferos y repercutiendo en el medio ambiente.

Respecto a las alternativas, desde hace años se está estudiando o bien empleando diferentes sustitutos que reducen  e incluso eliminan el peligro medioambiental atribuido al uso de la sal, entre ellos:

  • Gravilla o trocitos de material inocuo.
  • Acetato de calcio, magnesio, solo para aceras.
  • Uso de melaza de azúcar.
  • Safecote, un subproducto del refinado de azúcar.

Por todo ello, el Grupo Municipal Ciudadanos Fuenlabrada eleva al Pleno para su debate y aprobación la siguiente

MOCIÓN

1-. Instar al Equipo de Gobierno a emplear productos sustitutivos de la sal en caso de heladas cuyo uso derive en un menor perjuicio medioambiental, posicionando a Fuenlabrada como uno de los municipios españoles pioneros en la materia.